Abstract
En el presente estudio investigamos la adquisición del modo subjuntivo en 34 estudiantes universitarios cuya primera lengua es el noruego y que estudian el español como segunda lengua (L2) en la Universidad de Oslo. Nos limitamos al estudio del uso de subjuntivo en oraciones subordinadas sustantivas introducidas por la conjunción que y regidas por expresiones en la oración principal que agrupamos en cuatro categorías semánticas: volición; posibilidad y probabilidad; emoción y evaluación; y percepción física y mental. Es costumbre, en las gramáticas y los manuales de español L2, presentar estas (y otras) categorías semánticas como importantes indicadores del modo verbal (indicativo o subjuntivo) que se debe emplear en la oración subordinada. Así, la capacidad de los aprendices de utilizar el modo adecuado en la oración subordinada depende de su capacidad de identificar una expresión particular como miembro de una categoría semántica específica. Algunos estudios sobre la adquisición del subjuntivo en aprendices de español L2 han intentado averiguar cuáles son las categorías semánticas que en mayor grado fomentan el uso adecuado del subjuntivo y cuáles son las que lo dificultan. Además, Gudmestad (2006) indica que el uso correcto del modo subjuntivo varía también entre expresiones particulares que pertenecen a la misma categoría semántica. Esta observación nos ha invitado a investigar en más detalle si las categorías semánticas tienen estructuras internas que se puedan relacionar con el uso correcto del subjuntivo. Basándonos en la teoría de la categorización, importante dentro de la Lingüística Cognitiva, proponemos que dentro de las categorías semánticas ( volición , por ejemplo) hay expresiones que se evalúan como más centrales (querer, por ejemplo), mientras que otras expresiones se consideran más periféricas (preferir, por ejemplo). Por lo tanto, presentamos la hipótesis de que los participantes relacionarían el subjuntivo primero con las expresiones que consideraran más centrales, y que tardarían en relacionar este modo verbal con expresiones que se consideran más periféricas. Además de poner a prueba esta hipótesis, queríamos estudiar –más en general– la variación en el uso adecuado del modo verbal (subjuntivo o indicativo) para las cuatro categorías semánticas y la variación en el uso adecuado entre expresiones particulares dentro de estas categorías. Diseñamos un test (con una encuesta incluida) para probar nuestra hipótesis e investigar la variación según las categorías semánticas y la estructura interna de estas. El test constaba de tres partes con el propósito de identificar (1) la cuantía de input de español que los participantes han recibido, tanto a través de la educación (la enseñanza formal de idiomas) como por otras experiencias fuera de instituciones educacionales (información extraída a través del cuestionario); (2) el uso del modo verbal por los participantes en relación a las cuatro categorías semánticas y sus expresiones particulares (el test propiamente dicho); y (3) la evaluación de los participantes sobre la centralidad (el grado de prototipicidad) de las distintas expresiones dentro de su categoría. Un total de 34 estudiantes de español de la Universidad de Oslo fueron los participantes que realizaron el test. Analizamos el material estadísticamente utilizando el programa R . Los resultados de los análisis muestran que el uso de subjuntivo varía entre las categorías semánticas, lo cual confirma los hallazgos de estudios previos: entre las categorías semánticas que las gramáticas típicamente relacionan con el subjuntivo, los aprendices parecen relacionar algunas más fácilmente con el uso de subjuntivo, y otras menos. Además, nuestros resultados muestran que hay gran variación del uso de subjuntivo entre expresiones particulares pertenecientes a la misma categoría semántica. Estas observaciones señalan la necesidad de investigar la adquisición del subjuntivo en relación a expresiones particulares, y no solo en relación a las categorías semánticas abstractas. No podemos comprobar nuestra hipótesis de que las evaluaciones de los aprendices sobre la centralidad (el grado de prototipicidad) de las distintas expresiones (o sea, los resultados de la parte 3 del test) influirían en el uso adecuado del subjuntivo. Al contrario, observamos que los participantes no utilizan el modo (adecuado) de subjuntivo en lo referente a ciertas expresiones que consideran muy centrales en categorías que requieren subjuntivo, mientras que sí que lo utilizan con expresiones que evalúan como más periféricas en las mismas categorías. Ello nos obliga a preguntarnos si las categorías incluidas en nuestra investigación son entidades reales en la mente del aprendiz -entidades reales responsables del uso adecuado del subjuntivo. En nuestra discusión de los análisis sugerimos, en cambio, que los participantes utilizan en mayor grado la virtualidad como pista para el uso de subjuntivo, es decir, que los participantes se dejan guiar por la categoría semántica de virtualidad. Proponemos, además, e inspirándonos en la lingüística basada en uso, que la adquisición del subjuntivo puede producirse a través de expresiones particulares durante la fase inicial del desarrollo lingüístico, y que sólo después los aprendices de español L2 relacionarían el subjuntivo con categorías más abstractas, a pesar de la enseñanza explícita de estas.